26.11.12

Poniatowska, Bryce y la ética del escritor

A Elena Poniatowska le tocan el tema de Alfredo Bryce y el Premio FIL de Guadalajara 2012 que el escritor peruano, como se sabe, ha recibido a domicilio en medio de un escándalo, y ella se alinea con quienes piensan que es vergonzoso y fuera de lugar que Bryce acepte el premio y considera todo el asunto un problema de falta de ética.

Hasta ahí, no hay problema (yo también creo que Bryce debió rechazar el premio). Lo extraño de la situación es que todo esto lo ha dicho Poniatowska en una mesa de la FIL Guadalajara 2012, a la que ella acudió para recibir un homenaje por sus ochenta años, cuando sólo cuatro meses atrás Poniatowska estuvo implicada en un asunto donde quien pareció barrer toda ética profesional debajo de la alfombra fue ella misma.

A mediados de este año Random House publicó el libro Borges y México, editado por Miguel Capistrán sobre una versión previa de 1999, donde se incluía una entrevista hecha por Poniatowska a Borges en el año 1973, ya publicada antes, varias veces, en diarios, en revistas y en otros libros, durante las décadas de los años setenta, ochenta y noventa.

En un pasaje de esa entrevista, Poniatowska le lee a Borges dos poemas del escritor argentino, titulados "Instantes" y "Remordimiento", y anota las reacciones del escritor al escuchar sus propios versos en la voz de la mexicana. El detalle es que el poema "Instantes" no es de Borges y el poema "Remordimiento" no pudo haber sido leído durante esa entrevista porque Borges lo escribió recién en 1975.

El otro detalle es que, según se dice, el mismo Borges le hizo saber en 1978 a Poniatowska, luego de la primera publicación de la entrevista con el pasaje apócrifo, que ese poema no era suyo, y que a lo largo de los años siguientes, y de modo específico en 1990 (tras una republicación de la entrevista en un libro), María Kodama, la viuda de Borges, hizo pública su molestia por el hecho de que Elena Poniatowska insistiera en atribuir al argentino un poema terriblemente malo que él nunca compuso y cuyo carácter espurio ha sido demostrado innumerables veces.

(Que "Instantes" es un poema apócrifo es un hecho conocido desde hace tanto tiempo que yo mismo recuerdo el día en que mi amigo Daniel Salas, hace más de veinte años, me contó que el texto original, en prosa, lo había visto él mismo en un ejemplar antiguo de Selecciones, de donde a su vez lo tomó luego una escritora, Nadine Stair, que lo convirtió en el adefesio que hoy conocemos. Si quieren hacerse una idea del ridículo, consideren este hecho: cuando fue publicado en Selecciones, originalmente, en prosa, escrito por Don Herold, era un texto de humor satírico).

¿Recuerdan las primeras reacciones de Bryce ante las acusaciones de plagio? Dijo que podían ser consecuencia de un simple "error" y les echó la culpa a las secretarias y a los editores. En agosto de este año, Poniatowska culpó a los editores de Borges y México por no asegurarse de que el simple "error", el simple "descuido" que ella había cometido en el pasado fuera subsanado en esta reedición. Y sobre el "error" original dijo: "No es grave, ni me acuerdo".

Recapitulemos: Poniatowska incluye en la entrevista una escena en la que ella misma le lee a Borges un poema que no es suyo y un poema que no estaba escrito aún en 1973 y además describe las reacciones de Borges ante los textos: un episodio enteramente salido de su imaginación que es presentado como un hecho en un texto periodístico. Cuando le repreguntaron sobre el tema, ya revelada la falsedad, dijo que, aunque ella no lo recordaba, seguramente en la entrevista se decía que el texto era apócrifo. Eso también es falso. Luego dijo que había fundido dos entrevistas en una y que la segunda era posterior a 1975, pero lo único que ha podido confirmarse es que en 1975 ella habló con Borges en una conferencia de prensa y ningún otro reporte de la conferencia indica que haya habido la lectura de poema alguno.

Sólo para colocar todo esto en perspectiva, habrá que recordar que la fama de Poniatowska se ha cimentado crucialmente sobre libros hechos en base a entrevistas, presentados como crónicas, con un espíritu documental, que ciertamente van mucho más allá de los límites de la siempre huidiza objetividad periodística, pero que son presentados como cosa real, no como productos de la ficción.

Yo no sé ustedes, pero a mí me parece difícil confiar en la realidad de esas entrevistas hechas con frecuencia a personas casi anónimas, gente de a pie, testigos callejeros de hechos históricos (como la masacre de Tlatelolco), protagonistas sin agencia, víctimas, desconocidos, cuando vemos que Poniatowska deja volar su imaginación de esta manera incluso con alguien a quien fácilmente podemos considerar el entrevistado más célebre de la literatura hispana en el último siglo.

Eso, para no hablar del dudoso gusto literario de alguien que, teniendo a Borges en frente, o soñando con la posibilidad de leerle al mismo Borges un poema, elija un mamarracho atroz como el célebre "Instantes", como si ese poema fuera un buen ejemplo, un ejemplo conmovedor o inteligente, de la obra del mayor escritor de lengua española en nuestro tiempo.

En fin: como que Poniatowska podría haberse quedado callada, o podría haber tenido, no sólo ahora sino durante los últimos treinta y tantos años en que el artículo ha sido reproducido infinitamente, una actitud un poco más transparente. Eso de hablar de la ética ajena debería traer ciertas resposabilidades.

7 comentarios:

Pamplino dijo...

Hace poco escribiste:

"en toda discusión existirá una manera de poner en duda las ideas de una persona basándose en quién es esa persona. Pero la verdad o la falsedad de las cosas que esa persona diga no dependen de quién es esa persona, ni de dónde vive, ni de cuál es su origen, ni cuál es su edad, ni cuál es su lengua, ni cuán cerca o cuán lejos está del objeto sobre el cual habla, ni de si ha sido testigo o no del hecho al que se refiere. Si yo no encuentro la falsedad en las palabras, no tengo por qué buscarla en quien dice las palabras".

Eso me parece absolutamente sensato, pero hoy le dices a alguien que no hable de Bryce, porque ese alguien tiene rabo de paja.

¿No deberíamos discutir lo que habla Poniatowska antes que ver su pasado, que es a lo que le dedicas casi exclusivamente tu post?

Jucezave dijo...

Bueno el hablar sobre etica siempre va a convocar cierta raspado con el pasado. Pero el problema Gustavo es que en ese sentido entramos a una postura "El que este libre de culpa..." y sin darte cuenta normalizas el comentario. Ironicamente considero que Poniatowska se retracto y reconoció su error (no quiero justificarla) Pero en ese sentido tampoco podemos abrir la inquisición. En todo caso la frase es de Villoro (al que también podemos sacarle trapitos, no se las pesimas traducciones para el fondo de cultura económica de Lichtenberg) Por ello creo que le brindamos demasiado protagonismo al usuario de la frase, mas que vindicar la condena del acto...

Anónimo dijo...

De vuelta al ad hominem, Gustavo...

Gustavo Faverón Patriau dijo...

Mi post dice que yo estoy de acuerdo con que Bryce no debió aceptar el premio. Punto. No hay ninguna defensa de Bryce. Por el contrario: otros que han cometido faltas a la ética del escritor tampoco deberían estar aceptando homenajes, y eso es precisamente lo que está haciendo Poniatowska. ¿Qué pasó con eso de "predicar con el ejemplo"? Por enésima vez: un argumento ad hominem implica la negación de una proposición en base a la descalificación de quien la dice. Yo no niego lo que dice Poniatowska sobre Bryce (todo lo contrario); por tanto no existe ninguna cosa parecida a un argumento ad hominem.

Anónimo dijo...

Permíteme la digresión:

"la obra del mayor escritor de lengua española en nuestro tiempo"

Dicen que para gustos y colores... pero ¿cuándo Vallejo(Trilce, Poemas humanos, España, aparta..) y Neruda(Residencia en la tierra)dejaron de ser escritores?

Aunque Borges sin duda es un grande del idioma

Un saludo, muy buen blog, muy buen post. se torna tan interesante como tu antiguo blog

Anónimo dijo...

Me voy a quedar ciego con este nuevo diseño del blog...

Anónimo dijo...

Ya hizo una critica de este libro?
http://eljardindelmanicomio.wordpress.com/2012/12/07/luis-nieto-degregori-el-peru-es-un-estado-nacion-de-espaldas-a-sus-mayorias/